Con 220 empresas actuando en Brasil y 2 millones de hectáreas de área plantada para fines industriales, Brasil produce hoy 12.7 mil toneladas de celulosa al año y despunta como el cuarto productor mundial del producto, por detrás solamente de Estados Unidos, China y Canadá. Y su intento es seguir avanzando. Datos de la Asociación Brasilera de Celulosa y Papel (Bracelpa) muestran que, en los últimos 10 años, las inversiones en el sector sumaron US$ 12 billones, con tendencia a todavía aumentar.

Para llegar a estos resultados, el sector apuesta en tecnología e innovación. Un ejemplo es Veracel Celulosa, un proyecto agroindustrial integrado, que cubre todas las fases de la producción de celulosa - desde la plantación hasta la entrega del producto final. En junio de 2009, la compañía, con matriz en Eunápolis, estado de Bahia (norte de Brasil), puso en marcha el picador de troncos de maderas de la línea 3, lo más grande en operación en el mundo, con capacidad para procesar 400 metros cúbicos de madera por hora.

Suministrado por Andritz, líder mundial en sistemas y servicios para industrias de papel y celulosa, entre otras, el Picador Horizontal HHQ™ lleva cuatro motores WEG de media tensión (400 kW, de cuatro polos), que operan en régimen duro para garantizar el suministro de chatarra de madera para la producción de celulosa y para la generación de biomasa, utilizada como fuente de energía. Para aumentar la confiabilidad, WEG creó una sistemática de comisionamiento y puesta en marcha vía smart phone. Con esto, además del profesional de campo tener acceso inmediato a todas las informaciones de que necesita, es realizada la transmisión automática de los datos de campo para WEG, lo que posibilita más agilidad en la solución de eventuales problemas.

Con la entrada en operación de la nueva línea, prácticamente todos los motores usados en el proceso productivo de Veracel son WEG – uno de los factores decisivos en el momento de eligir el proveedor del equipamiento. La instalación de la nueva línea de picadores eliminó un factor limitante en la producción de chatarra de madera para la celulosa y proporcionó ganancias ambientales y económicas para la compañía, con la generación de energía excedente. Además de eso, permitió disponibilidad operacional de las otras dos líneas, lo que es importante para el mantenimiento.

En el inicio del proceso

El picador de troncos está en el inicio del proceso productivo de la celulosa. Es allí que los troncos de eucalipto y pinus, ya descascados, serán transformados en chatarra de diversos tamaños. O sea, el tronco adentra entero en el equipamiento y sale picado. En esta etapa son necesarios motores potentes lograr atender a la aplicación. En el picador de troncos de Veracel cada uno de los cuatro motores WEG tiene potencia de 400 kW – alrededor de 2.200 CV totales. Un coche popular, por ejemplo, tiene un motor de aproximadamente 70 CV.

La chatarra es llevada para el digestor, donde es cocido en alta temperatura y presión, con productos químicos. Entonces, da origen a la pulpa de celulosa, que seguirá para lavadoras y será separada del licor negro. En esta etapa, la pulpa, que es marrón, puede pasar (o no) por el blanqueamiento, dependiendo del uso que tendrá. Después es secada y separada en fardos. De esta manera, está lista para irse a la máquina de papel – en la propia industria donde fue extraída o en una otra.

El pinus, de fibras largas, es utilizado para la confección de papeles más resistentes, como los de embalaje. Ya el eucalipto, com hibras cortas, es usado para la fabricación de papeles descartables o destinados a el escrito, por ejemplo.

Presente en todo el proceso

WEG ofrece soluciones para todos los procesos de las industrias de celulosa y papel. Eso incluye desde los transformadores, motores, generadores, productos para accionamiento y control de los equipamientos (contactores, disyuntores, llaves, relés etc.), drives (convertidores de frecuencia, arrancadores suaves, servoconvertidores etc.), paneles eléctricos y automatización, hasta la línea de pinturas la protección de equipamientos, tanques y estructuras metálicas.

Además de eso, suministra soluciones para la generación de energía propia a partir de biomasa, en este caso, la madera. Todo eso permite el suministro de soluciones eléctricas integradas y de paquetes en el régimen Turn-Key (llave en mano), incluyendo, además de los productos y servicios WEG, el proyecto, los materiales de instalación electromecánica de campo y los servicios de instalación propiamente dicha. La amplia red de distribuidores y talleres de servicio regionales atiende a las necesidades de partes y piezas sobresalientes y da soporte técnico a los productos suministrados.